¿Qué sabemos de adicciones?
Cómo se previenen las adicciones, cómo son los tratamientos, de qué manera enfrentarnos a ellas,
de qué manera le gustaría a un chico que le hablen de la droga y de qué manera un padre debiera hablarle a un hijo de las drogas. A veces pareciera que todas las fórmulas son equivocas…
La droga ya ha trascendido las barreras sociales, ha trascendido la marginalidad, no hay una causa concreta, no es porque tiene problemas psicológicos, o porque se está divirtiendo, porque dejó de hacerlo, por llamar la atención, por no llamarla, por pertenecer a un grupo, por hacerlo solo por cuenta propia, por experimentar, por saber lo que es, por contarlo, son tan variadas las causas que inician a alguien en la drogadicción que es totalmente en vano establecer una regla de cómo no caer en la droga.
Primero vamos a poner la droga en el lugar que tiene que estar: la drogadicción es solamente para estúpidos, no existe la drogadicción para gente inteligente, no existe la drogadicción para mentes fuertes, existe la drogadicción para mentes débiles, existe sólo para alguien que no puede decidir cuándo dejar de consumir, cuándo hacerlo, cuándo no, sino alguien que se deja llevar por los demás, por el entorno, por sus emociones, por las circunstancias, pero en ese caso el tratamiento no sería contra la droga, sería contra la autoestima y la determinación de esa persona, entonces el problema no es una sustancia, el problema es que esa persona carece de instinto de superación, de convicción de ideales, es una persona prácticamente nula, si uno supiera que va a entrar en la droga y va a salir cuando quiere, ya no habría ningún problema aunque todo el mundo se drogase, pero lo que sucede es que, hasta que no estamos hundidos hasta el cuello en las drogas no sabemos si podemos o no podemos dejarla. Cuando sabemos si la podremos controlar o no, ya es demasiado tarde, lo más probable es que no podamos controlarla, lo más factible es que hasta el cerebro más fuerte se vea doblegado por la adicción.
Conocer las drogas: Primero terminemos con los mitos, existe una sola droga física, es decir lo que comúnmente se le dice “el cuerpo te la pide” y son los opiáceos es decir la morfina, codeína, tebaína, y la más adictiva droga que existe en el mundo la heroína, en una semana el heroinómano queda enganchado y pasa de consumir desde 10 mg a 400mg y para un iniciado 400 mg son mortales, o sea que la tolerancia es tan alta que en una semana el adicto pasa a asimilar lo que a alguien que nunca la probó lo mataría de sobredosis. La dependencia es física porque llegado un momento de la adicción no hay retorno, si el adicto sigue consumiendo morirá de sobredosis y si la deja, lo matará el estado de abstinencia, solo se la puede tratar con una sustitución de drogas como metadona, etc.
En realidad el trasfondo de todas las adicciones es la seguridad que tenemos en nosotros mismos es saber qué es lo que queremos, lo ideal sería probar cada una de las drogas y no volver a tocarlas más, como una cuestión de aprendizaje, pero eso es alguien que no creo que nadie esté capacitado para hacer, sería una muy buena forma de aprender saber de qué se tratan que efecto provocan en el organismo y no volver a verlas nunca más.
Pero decirle no a la droga es hacer la misma apología, esto es solo una conjetura, pero si la droga se legaliza no habría más drogadictos, en los consumidores actuales no habría cambios significativos, pero el año siguiente, la cantidad de personas que se inician en las drogas se reduciría a la mitad porque ya carece del factor “prohibido” y entonces ya no llamaría tanto la atención a generaciones futuras, y por eso no se iniciarían, la mejor publicidad que tiene la droga es que está prohibida y eso es lo llamativo, que el adolescente, más si sus padres no se drogan, acceder a un mundo en donde ellos no pueden opinar, porque desconocen y entonces al fin ellos saben más que sus padres.
Cómo hacemos entonces para mantenernos lejos de las drogas:
- Practicar deportes, sentirnos sanos, sentirnos bien eso nos dará más seguridad en nosotros mismos y nos va a evitar necesitar de una sustancia para sentirnos en mejor estado.
- Tener metas en la vida y saber que una adicción te la va a retardar y no solo eso te la puede quitar para siempre el alcanzar tus sueños
Si una persona tiene metas, si hace ejercicio físico, si tiene convicciones, seguridad, si aprende a dominar su mente, la adicción directamente no existe si uno sabe a dónde va y lo que quiere de la vida, se drogue o no se drogue va a poder o le va a resultar más fácil salir de ella, porque todos podemos trastabillar, todos podemos caer, nadie está exento, y sepan que la mayoría de los que hoy dicen la droga es una basura, el día que se sientan una basura se van a drogar porque de esa manera están programando su cerebro, la droga es droga, nada más, restémosle importancia y entonces dejara de ser un tema temido, la adicción no significa nada, significa solo para quien está perdido, para quien no tiene poder de determinación, para quien no sabe qué hacer de su vida y no tiene el valor de matarse. Pero no es el problema la droga sino todo lo que tiene detrás que muchas veces es la ignorancia el desconocimiento.
Las estupideces: Cierta revista hablaba de la ridiculez de cómo se aborda el tema de la droga y de cómo le causaba gracia escuchar frases como: combatir la droga como si para terminar con los suicidios hubieses que atacar a los balcones o a las cuerdas.
La única manera que existe de mantenerse fuera de las drogas y las depresiones que casi siempre conducen a estas, es teniendo estímulos, metas, motivación, es decir un motivo que nos inspire, un proyecto de vida.
La drogadicción, las fobias o la mayoría de las enfermedades mentales son como el sida: es decir incurables, se las puede aletargar pero están allí, en cambio lo más eficaz para el sida es la prevención. ¿Cómo creen que se previene a un adolescente para que no entre en las drogas? Diciéndole: -¡no te drogues!-. Si esa fuera una fórmula inapelable nadie hubiese entrado en las drogas nunca. La única solución es que formen una meta, un espíritu de lucha y expectación y que, si bien pueden llegar a consumir de igual manera, les resulte más fácil salir. Solo es cuestión de regresar a la determinación y a la firmeza de carácter que nos hemos formado.
Lo que sucede con las enfermedades mentales es que por lo general no tienen una cura definitiva, sino que más bien se desarrolla sobre ellas un tratamiento de aletargamiento, se la puede ocultar, tapar, quedan enmascaradas pero nunca se solucionan del todo, se puede retardar la evolución de la enfermedad pero no se puede convertir a persona depresiva en feliz, pero hay una forma de evitar que esa persona caiga en la depresión. No existen los centros de rehabilitación de alcohol y drogas. Ya que luego de 10 años de salir de alta de esos centros se siguen llamando adictos a ellos mismos y consideran que el tratamiento será de por vida.
La realidad es que las charlas sobre drogas no sirvieron nunca. Decirle a un joven que no se drogue es igual a decirle: -¡ve a drogarte!- y que te muestre que la droga está prohibida y es mala para tu salud y que serás mal visto por la sociedad, que dicho sea de paso, lo discrimina, anula y menosprecia y con la cual se halla en conflicto, es la mejor publicidad porque omite las características transgresoras y masoquistas del ser humano que son mucho más marcadas y tienen mayor influencia sobre la personalidad del adolescente.
La única profilaxis es establecer una meta, un proyecto de vida y forjar la determinación de cumplirla, va a hacer que el espíritu se vuelva cada vez más fuerte, al volverse cada vez más fuerte hace que el carácter se vuelva más firme y cuando nuestro carácter es firme sabes que si estas en dirección, todo lo que te pueda retardar o alejar de ese lugar lo vas a tener que quitar de tu vida. Una persona que esta fuerte físicamente es muy improbable que se deprima psicológicamente.
Una persona con objetivos establecidos que está en constante lucha es muy improbable que genere en ella una personalidad depresiva, porque está transformando su vida constantemente en logros, en desafíos no tiene tiempo para sentarse a pensar en lo mal que está el mundo, en lo mal que esta su vida, de hecho su vida lanza en el balance diario solamente réditos; porque las perdidas las toma como inversiones para conseguir otras cosas: tuvo que perder mucho para conseguir mucho más.
Con esto no quiere decir que por alguna circunstancia ajena a nosotros no nos deprimamos, pero nos va a resultar mucho más fácil, salir de esa depresión.
Indicadores de riesgo
ciertas señales en la conducta pueden ayudar a identificar a tiempo
Cómo afectan las drogas
- El abuso de drogas puede generar varios desordenes psiquiatricos y psicologicos o puede agravar enfermedades mentales ya existentes.
- El consumo periódico de drogas puede afectar los organos vitales: corazón, cerebro, hígado, riñones…
- Además de provocar alteraciones en la conducta, estados de ánimo, bajo rendimiento laboral o académico, aislamiento social, ruptura de lazos afectivos.
¿Qué es la drogadicción?
La adicción es una enfermedad en al cual se altera la conducta, el organismo, y la psiquis a causa del consumo abusivo e indebido de una sustancia. Según la Organización Mundial de la Salud la adicción es el estado de intoxicación crónica o periódica originada por el consumo repetido de una droga, natural o sintética, caracterizada por:
- Una compulsión a continuar consumiendo por cualquier medio.
- Una tendencia a aunmentar la dosis.
- Dependencia psiquica o en algunos casos física por acostumbramiento de las celulas sistemas celulares involucrados.
- Consecuencias perjudiciales para el individuo y la sociedad.
Muchas personas que no tienen metas ni propósitos en la vida, que por lo general son las mismas causas que las indujeron a consumir drogas, creen erroneamente que pueden salir de las drogas con solo proponérselo, pero lo primero que afecta el consumo de drogas es la capacidad volitiva, es decir su propia voluntad. esta creencia llevará a la persona a que intente por cortos periodos de tiempo a dejar de consumir sin éxito, o poder sostener esa decisión a largo plazo. Esto podría dar como consecuencias recaidas y perdida de la esperanza propia de que la situación vaya a cambiar. Como ya dijimos existen dos tipos de personas las qeu son fuertes de mente y las que no lo son. Sin embargo la mayoría de las personas se mienten a ellas mismas suponiendo que son fuertes de espíritu cuando en realidad no lo son. Si no eres fuerte busca ayuda, para eso existen especialiestas y centros especializados.